Desde 2016, Facebook ha estado pagando a usuarios de entre 13 a 35 años hasta $20 USD por mes para “vender su privacidad” mediante la instalación de la aplicación "Facebook Research" de iOS y Android.
Este programa o campaña se administra a través servicios de pruebas beta llamados: Applause, BetaBound y uTest con el propósito de encubrir la participación de Facebook, Este estudio se conoce como "Proyecto Atlas", un nombre otorgado por el esfuerzo de la compañía por mapear nuevas tendencias y rivales en todo el mundo.
Aplicación “Facebook Research” solicitando a los usuarios que "confíen" en ella con un amplio acceso a sus datos
Facebook entró por primera vez en el negocio del monitoreo y detección de datos cuando adquirió Onavo por alrededor de $120 millones en 2014. La aplicación VPN que ayudaba a los usuarios a rastrear y minimizar el uso de su plan de datos móviles, que le dio a Facebook poder para obtener análisis profundos sobre qué otras aplicaciones usaban estos.
La aplicación requiere que los usuarios instalen un certificado de desarrollador empresarial, que le da al gigante de las redes sociales el nivel de acceso que le permite, incluso, ver los mensajes privados de los usuarios en las redes sociales, chats E2E como Telegram, de aplicaciones de mensajería instantánea, correos electrónicos, búsquedas en la web, actividad de navegación web e información de la ubicación de estos.
“Como muchas compañías, invitamos a las personas a participar en investigaciones que nos ayuden a identificar las cosas que podemos hacer mejor. Dado que esta investigación tiene como objetivo ayudar a Facebook a comprender cómo las personas usan sus dispositivos móviles, hemos brindado amplia información sobre el tipo de datos que recopilamos y cómo pueden participar. No compartimos esta información con otros y las personas pueden dejar de participar en cualquier momento ".
Facebook ha estado en la mira de todos por sus grandes problemas asociados a la privacidad, es momento de que como usuarios activos seamos cautos al usar las redes sociales y sepamos resguardar nuestra privacidad en la era de la interconectividad.
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